Como cada año, el 1 de diciembre se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA.
A menudo cuando se habla de este día se cometen errores en el uso de algunos términos en relación con el VIH y el SIDA. Incluso se utilizan ambos términos de manera indiscriminada como si fueran lo mismo. Pero no, ¡no son lo mismo!
Lo malo de usar terminología de manera incorrecta es que se transmiten ideas erróneas, se crea más confusión en torno al tema, así como aumentan los prejuicios, la discriminación y el estigma hacia las personas con VIH.
Por lo que me parece oportuno, antes de nada, aclarar algunos conceptos.
El VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana), tal como su nombre indica, es un virus, que puede entrar en el organismo a través del flujo vaginal, el semen, la sangre y la leche materna. Este virus no presenta síntomas, pero muy lentamente va acabando con las células CD4, que son un tipo de glóbulos blancos (linfocitos) muy importantes para nuestro sistema inmunológico, y que dicho virus utiliza, además, para replicarse.
SIDA significa Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida y sólo se manifiesta tras muchos años con el VIH, si no se recibe tratamiento, caracterizándose por el desarrollo de infecciones oportunistas, dado que el sistema inmunológico no tiene defensas porque el virus ha destruido la mayor parte de las células CD4.
Los antirretrovirales son fármacos que inhiben la replicación del virus, por ello es tan importante recibir tratamiento. Hoy en día, apenas tienen efectos secundarios, por lo que, si se cumple con dicho tratamiento, las personas con VIH pueden vivir una vida larga y sana.
La carga viral es la cantidad de VIH presente en el organismo de la persona. Cuando esta carga se hace indetectable, gracias al tratamiento, el virus no se puede transmitir.
En cuanto a algunas expresiones usadas en relación con este tema, es importante hablar de prácticas de riesgo y no de grupos de riesgo. Relacionar el VIH con determinados grupos de personas no es correcto y sólo da lugar a la discriminación de las mismas. Hay que tener claro que el riesgo está en las prácticas que se llevan a cabo, no en los grupos.
Tampoco se debe hablar de contagio pues no se trata de una enfermedad contagiosa, ni mucho menos. Lo correcto es hablar de transmisión (El VIH se transmite, no se contagia).
Ante las cifras que vamos a ver a continuación es importante recordar el uso del condón como método fundamental para evitar el VIH en las relaciones sexuales. Aunque también existe la Profilaxis Post Exposición (PEP) que consiste en un tratamiento de fármacos antirretrovirales que se toman durante 28 días (comenzando siempre antes de que hayan pasado 72 horas de la práctica de riesgo), y que evita que el virus se propague, eliminándolo antes de que se haya infectado la persona.
Cada año se producen en España más de tres mil nuevas infecciones por VIH, siendo uno de los países de la Unión Europea con las tasas más altas. Alrededor de 150 mil personas viven con el VIH en nuestro país, y 1 de cada 5 casos no está diagnosticado, es decir, esas personas no saben que tienen el virus, por tanto, no reciben tratamiento y pueden seguir transmitiéndolo. De ahí la necesidad de hacer hincapié en que hay que hacerse la prueba del VIH.
A nivel mundial, más de 36 millones de personas viven con el VIH, de las que sólo alrededor de unos 21 millones tienen acceso a terapia antirretrovírica actualmente. Esto significa que queda mucho por hacer.
Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, aprobados por la Organización de las Naciones Unidas, incluye acabar con la epidemia de sida para el año 2030. Para ello, la meta global del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) consiste en cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida.
Para acabar, os voy a hacer 3 propuestas:
- Evitar nuevas infecciones asumiendo nuestra responsabilidad individual de usar siempre condón.
- Hacernos la prueba del VIH para que todas las personas infectadas puedan recibir tratamiento.
- Acabar con el estigma y la discriminación hacia las personas VIH-positivas.
Video Educativo SIDA de Ignacio Cabrera
6 comments
Hola Ester!
Qué bueno que aclaras conceptos y nos compartes la información. Desgraciadamente, aún hay mucha ignorancia y discriminación. Por fortuna, ya no tanta como en el pasado. Fíjate que lo que sí me sorprendió hace unos meses, fue leer que hay personas se quieren contagiar de forma intencional. Y no solo de VIH sino también de Sida.
Saludos y excelente día
Gracias por tu comentario, Ramón. Es un tema sobre el que en efecto existe mucha confusión. Sobre lo que comentas decirte que tal como explico en el artículo no se debe usar el término «contagio». Sería más correcto decir que hay personas que buscan infectarse. He escuchado alguna historia así y resulta difícil de creer. Dices que no sólo de VIH sino también de sida, volvemos a lo mismo, si revisas su definición, creo que entenderás que es imposible contagiarse de sida.
Buen día, Ester.
Mil disculpas y qué vergüenza! Ayer que pensaba sobre mi comentario, cuando me di cuenta de todo lo incorrecto que escribí y me dije ¡Sí serás! justo lo que te acaban de decir y lo escribes mal. Así que de nuevo perdón.
Sobre las personas que buscan infectarse, sí difícil de entender y creo que muchas siguen, como me pasó a mí, incluso después de leerte, en mi caso creo que por la costumbre, pero no tengo perdón, confundiendo los términos.
Lindo día
La de confusiones y dudas que hay aún sobre el VIH y el SIDA. Y lo peor de todo no es que no disminuya, si no que encima parece que hay un repunte en los últimos años…
Gracias por las aclaraciones.
Besicos.