Hoy os hablo del «lifestyle swinging», la primera forma de relaciones personales no monógamas practicada por personas heterosexuales y bisexuales.
Si hacemos un breve repaso histórico sus orígenes datan entre 1930 y 1940, aunque podemos encontrar distintas versiones sobre su nacimiento. Ya sabemos que hay pocas prácticas, en término de relaciones humanas, que no se hayan llevado a cabo ya, sin embargo existe un comienzo para todo, aunque sea oculto.
¿Cómo surge este movimiento?
Los pilotos de la II Guerra Mundial
Esta es una de las versiones más conocidas. Aunque no encontramos bibliografía seria al respecto, no hay unanimidad sobre sus orígenes, la presunción histórica más aceptada es que tuvo su comienzo en los Estados Unidos en los años 60. Los pilotos de la fuerza aérea norteamericana durante la Segunda Guerra Mundial pasaban largos periodos fuera de su hogar, años incluso. Otros morían y no regresaban (la casuística de mortalidad en combate era elevada) y es por ello que consentían que sus mejores amigos y compañeros realizaran visitas a sus mujeres con carácter sexual. De esta forma, ellas no se verían en la necesidad de ser infieles, siendo los maridos consentidores conscientes de esa forma de satisfacer las necesidades sexuales de sus parejas. En el caso de fallecer sus maridos, los supervivientes se encargaban de cuidar de las viudas.
Bases americanas en California y el juego de las llaves
Hay otra hipótesis que dice que fue en las bases militares de California, durante la década de los 50, en donde tuvo origen esta práctica. Los medios de comunicación de la época se hicieron eco de un fenómeno desarrollado en los barrios residenciales, que no era ni más ni menos que la celebración de fiestas que se realizaban con el nombre de «intercambio de esposas». Es de aquí donde surge el famoso concepto de «juego de las llaves». En estas fiestas, mucho más escuchadas entre 1960 y 1970, los maridos colocaban las llaves de su casa dentro de un bol, y sus esposas elegían al azar una de ellas. Practicaban sexo con el hombre a quien esas llaves perteneciesen.
Filipinas y los soldados americanos
Encontramos una versión bastante semejante de este juego descrita por Bracamonte (2008), en la que afirma que la práctica swinger empezó en Filipinas, a mediados de los años 50, también haciendo referencia a los soldados estadounidenses. Ellos, junto a mujeres filipinas o de la zona que no eran sus esposas, jugaban a colocar dentro de un sombrero las llaves de sus habitaciones y, al azar, intercambiaban las parejas.
Otros orígenes
Además de las fiestas secretas del juego de las llaves, que tenían un toque clandestino e interesante, existían grupos swingers hippies y nudistas alrededor de los años 60. Estos grupos promovían un alto grado de libertad en las relaciones sexuales y de pareja muy cercano a lo que es el poliamor ya que la pareja estable podía mantener relaciones sexuales con otros miembros del grupo.
En España, el movimiento tuvo su auge en círculos restringidos y exclusivos en los años 70 y, como anécdota, se cuenta que en un lujoso chalet de la Sierra de Guadarrama se organizaban este tipo de reuniones entre pequeños y limitados grupos de parejas. Otro lugar en donde se desarrollaba dicha actividad era en los campings. El canal de comunicación para hacer contactos, para dar a conocer los encuentros, era una revista liberal con carácter erótico y publicada por la barcelonesa revista Lib, Ediciones Zeta, entre 1976 y 1984.
En México también se registra un movimiento importante, que pudo comenzar a desarrollarse mucho antes, hacia el año 1990 y fue dado a conocer en revistas eróticas como Club swinger y Galería Erótica.
El primer trabajo periodístico bien documentado, acerca del estilo de vida swinger, es de Terry Gould con su libro titulado Lifestyle. En algunos apartados cita a un matrimonio de sexólogos reconocidos que llevaban a cabo prácticas swingers y que especializaron en ellas. Sus nombres eran Dwight y Johan Dixon. Inicialmente el trabajo de Terry se realiza desde un punto de vista periodístico. Se le encargó realizar un trabajo acerca de un club swinger con el objetivo de crear un artículo amarillista, para visibilizar solamente la parte negativa de estos ambientes. Sin embargo, decide ir más allá y se mete de lleno a investigar sobre por qué los swingers deciden adoptar este estilo de vida. Como dato curioso, este autor nunca llegó a participar activamente de esta práctica. En su libro Lifestyle llega a describir ampliamente este tipo de relaciones, elaborando una discusión con varias teorías y profundizando también en temas de la biología evolutiva.
Muchos de los que hemos leído su libro, y que practicamos este estilo de vida, nos parece que se queda bastante corto. Incluso autores de otros estudios coinciden en que no retrata de forma adecuada el verdadero lifestyle, lo cual puede deberse a que siempre tiene una visión periodística, con una muy buena investigación. Escribir un libro acerca de un estilo de vida y una subcultura, sin practicarlo, no puede dar una visión completa del hecho tratado.
Independientemente de sus orígenes, que con toda seguridad fue mucho antes de lo que os he contado y que está datado, hay también referencias de otro tipo de prácticas de intercambio, las orgías. En el contexto del swinging, entendido básicamente como un «intercambio sexual consentido entre parejas», la práctica ha evolucionado a distintas modalidades, siendo ahora un asunto privado más o menos secreto. En la actualidad, sus practicantes se animan cada vez más a «salir del armario» aunque no lo comuniquen abiertamente. Hoy en día el estilo de vida swinger es una subcultura muy grande, que se desarrolla en distintos países, y tiene una organización bastante sólida.
Cuenta, por supuesto, con la evolución y el apoyo tecnológico de redes sociales, sitios web, revistas, páginas de contactos, fiestas, cruceros, congresos y los ya conocidos resorts y campamentos.
Otro día hablaremos de las personas que practican este lifestyle. Ese, será tema ¡de un nuevo post!
- Texto editado y corregido por Más Allá del Placer.