Cada 14 de febrero llega San Valentín y todo se llena de corazones rojos… Love is in the air… flores, cupidos y marketing de todo tipo para romantizar y monetizar el “Día de los Enamorados”.
Pero dejadme plantear una pequeña reflexión: por mucho que San Valentín sea el patrón de los enamorados, este día nada tiene que ver en realidad con el amor ni con los buenos tratos. Porque estar enamorado no es lo mismo que saber amar.
De hecho, si echamos un ojo a nuestro alrededor, o le preguntamos a quienes ejercen como terapeutas de pareja, veremos que bastantes personas se encuentran dentro de relaciones de maltrato o cuanto menos donde no se practican los buenos tratos.
¿Por qué no es lo mismo amar que estar enamorado?
Amar y estar enamorado son dos términos que a menudo se confunden. Sin embargo, hay grandes diferencias que vamos a ver a continuación:
- El enamoramiento es algo que sucede de una manera pasiva e inconsciente. Ocurre al inicio de conocer a alguien, cuando apenas sabemos cómo es realmente. En ese momento es cuando sentimos las famosas “mariposas en el estómago”, porque todo nos parece perfecto, ya que idealizamos a la persona. Es una fase transitoria que provoca emociones intensas y una potente respuesta química a nivel cerebral que no podría sostenerse durante mucho tiempo.
- El amor, en cambio, se construye de una manera activa y consciente. Esto es cuando ya conocemos las virtudes y defectos del otro y cuando adquirimos un compromiso. Se consolida en base al respeto, a los cuidados mutuos y, en definitiva, debería estar basado en buenos tratos.
Buenos tratos versus malos tratos
Algunas personas sabrían identificar ciertas conductas de maltrato extremas (como agredir, insultar, amenazar, humillar, culpabilizar…). Si bien, hoy en día, aún hay otras que se justifican (como sucede a menudo con los celos o el control) o pasan desapercibidas. Estas últimas, sobre todo, en relación con las nuevas tecnologías y el abuso digital (espiar el móvil de la otra persona, mirar sus emails, llamadas, etc.).
Por otra parte, a menudo se desconoce qué son los buenos tratos. Aquí tenemos que hablar de cuidados, porque las relaciones sanas implican, en primer lugar, respeto, pero también generosidad.
Dice el sexólogo Fernando Villadangos que “a amar se aprende y, por lo general, lo hacemos con el ejemplo”. Esto significa que la forma en que expresamos el amor hacia nuestra pareja se puede aprender y también se desaprende (con ayuda), si nos lo proponemos porque nos lo enseñaron mal.
Todos tenemos derecho a buenos tratos en nuestras relaciones y un ejemplo de ello son los 5 lenguajes del amor de Gary Chapman.
Los 5 lenguajes del amor
En su libro, Los 5 lenguajes del amor, Gary Chapman indica que el amor puede expresarse a través de las siguientes formas:
- Contacto físico (caricias, besos, abrazos…).
- Palabras (desde un te quiero hasta elogios y refuerzos verbales).
- Tiempo de calidad juntos (en el que puedan estar a solas y dedicarse atención mutua para dialogar, tener intimidad…).
- Regalos (materiales o no), obsequios, detalles o sorpresas inesperadas, sin ninguna fecha especial, que denotan que has pensado en la otra persona.
- Actos de servicio (como preparar la cena de tu pareja un día que llega tarde de trabajar o cuidar de ella cuando está enferma) .
No todo el mundo sabe expresar su amor por igual: hay quien tiene mayor facilidad para algunas de las formas mencionadas y a quien se les dan mejor otras de ellas. Pero, sin duda, estas formas de expresarnos están en la base de los buenos tratos.
Un San Valentín diferente
Durante la fase de enamoramiento, es habitual hacerse regalos y tener detalles con la otra persona para intentar conquistarla. De ahí que San Valentín se haya convertido en un día comercial.
Pero, para aquellos que se aman propongo una cosa diferente: ¿qué tal si este año en lugar de regalaros bombones, flores, o iros de cena romántica, dedicáis un tiempo para simplemente conversar sobre el tipo de relación que tenéis, sobre el lenguaje que usa cada uno para expresar su amor, sobre vuestras necesidades y cuidados mutuos?
“El amor no se mantiene solo, es como una hoguera a la que hay que ir echando palitos para que no se apague”.
Fernando Villadangos