A lo largo de la historia, hubo muchas mujeres que decidieron, por diferentes motivos, vestir ropas consideradas masculinas en su época: unas tuvieron que hacerlo empujadas por el deseo de salirse de los roles femeninos y poder estudiar o dedicarse a trabajos que en aquel momento únicamente estaban reservados para los hombres; otras simplemente querían romper con las normas establecidas.
Fueron mujeres pioneras, mujeres valientes, atrevidas… como Jeanne Baret, Jane Dieulafoy, las Teddy Girls y muchas más…
Jeanne Baret
Jeanne Baret fue una exploradora y botánica del siglo XVIII, reconocida como la primera mujer que dio la vuelta al mundo en barco. Aunque para dicha hazaña, tuvo que hacerse pasar por hombre, usando ropas masculinas, ya que las leyes francesas prohibían la presencia de mujeres en barcos de la marina.
Como asistente de Philibert Commerson (botánico de Luis XVI) consiguió una colección de más de 6000 especies de plantas en un viaje de circunnavegación, hasta que fue descubierta y obligada a desembarcar.
A pesar de su importante contribución para la ciencia, fue olvidada durante dos siglos hasta que en 2010 la publicación del libro El descubrimiento de Jeanne Baret, de la escritora Glynis Ridley, la sacó del anonimato. Y en 2020 Google la homenajeó con su Doodle por el 280° aniversario de su nacimiento.
Jane Dieulafoy
La periodista y arqueóloga francesa Jane Dieulafoy, fue conocida a finales del siglo XIX como “la dama que se viste de hombre”.
Durante la guerra franco-prusiana, cuando su marido se alistó en el ejército, ella hizo lo mismo, para lo que tuvo que cortarse el pelo y vestirse con ropa de hombre (algo que era ilegal en el París de aquella época).
Tras la guerra, Jane y su marido comenzaron una serie de viajes de exploración por Egipto, Marruecos, Persia, Mesopotamia… y otros lugares prácticamente desconocidos. Aunque para burlar las restricciones impuestas a las mujeres en muchos de estos países tuvo que usar nombres falsos y vestirse con ropas masculinas.
Sus diarios de viaje fueron publicados por la revista francesa Le Tour du Monde y tuvieron mucho éxito. Llegó a recibir la Legión de Honor y el título de “Caballero” por parte del gobierno francés, quien además le concedió un permiso oficial para usar pantalones.
Las Teddy Girls
En este caso no se trata de una mujer sino de un grupo de mujeres, una subcultura urbana que nació en Londres tras la Segunda Guerra Mundial.
Las Teddy Girls, también conocidas como Judies, se caracterizaron por su apariencia masculina en sintonía con los Teddy Boys, quienes intentaron salirse del estilo austero marcado por el panorama de racionamiento y tomaron el estilo eduardiano de las clases altas. Como eran jóvenes de la clase obrera, se dedicaban a recorrer mercadillos de segunda mano para adquirir prendas y confeccionar su propio look con chaquetas holgadas y pantalones arremangados. Aunque más allá de la ropa, era una actitud de chicas duras que trasmitía seguridad.
Las Teddy Girls no tuvieron una actividad pública tan llamativa como la de los Teddy Boys, quienes se destacaron por ser una pandilla conflictiva. Esto hizo que ellas cayeran en el olvido, hasta que las fotografías de Ken Russell sobre este grupo de chicas, tomadas durante la posguerra y desaparecidas durante 50 años, fueron encontradas en 2005. Entonces se descubrió que eran un documento único de esta subcultura de jóvenes que rechazaban los roles femeninos más tradicionales.
Y muchas más…
Si rebuscamos en la historia podemos encontrar otras muchas mujeres que se vistieron con ropas masculinas o incluso se hicieron pasar por hombres, algunas tan desconocidas que se consideran leyendas como Agnódice o la papisa Juana.
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Video de UMUDivulga
Hubo mujeres que se vistieron con ropas masculinas únicamente para ir a la universidad, como la gallega Concepción Arenal. Otras lo hicieron durante toda su vida o hasta ser descubiertas como Margaret Ann Bulkley (conocida por el nombre de James Stuart Barry), quien se hizo pasar por varón para estudiar Medicina en la Universidad de Edimburgo y ejercer como cirujano en el ejército británico.
La lista de mujeres puede ser infinita ya que la mayoría son desconocidas. Pero, en definitiva, todas ellas nos sirven hoy en día para cuestionar los roles de género y las supuestas ropas masculinas y femeninas, así como la necesidad de liberarnos de los estereotipos de género.