Siguiendo el hilo de mis últimos artículos, hoy nos sumergiremos en el océano del estilo de vida y la salud, especialmente en el mar de nuestros hábitos y la fertilidad humana. En esta ocasión veremos los factores implicados en la fertilidad masculina, y en el próximo texto, abordaremos las conexiones entre el estilo de vida y la fertilidad en la mujer.
El pasado mes de abril publicamos un artículo que nos sirve perfectamente de introducción al tema que nos ocupa: lo titulamos dieta y ¿fertilidad? y es que sabemos que la alimentación es uno de los factores modificables más interesantes para mejorar la salud sexual y reproductiva. Alimentos poco saludables como los ultraprocesados, las carnes rojas, y algunos lácteos, parecen empeorar la calidad del esperma y su motilidad. Y por otro lado, alimentos saludables, como vegetales, frutas y verduras y legumbres, parecen asociarse con mejores cotas de fertilidad masculina, además de prevenirnos de numerosas patologías muy poco interesantes.
En esta ocasión, queremos abordar tres pilares de la prevención primaria para la salud humana, que están relacionados con la fertilidad masculina: como son la alimentación, la actividad física y el tabaquismo.
La infertilidad es un asunto que afecta a un 15% de la población mundial. Actualmente tenemos evidencias de que los anteriores cambios en el estilo de vida, pueden ser suficientes para revertir el estado de infertilidad en algunas personas, aunque hay muchos más factores implicados de los que nos podemos permitirnos citar en este artículo. Por lo que ante un problema de este tipo, siempre recomendaremos asesoramiento profesional por parte de un equipo multidisciplinar de salud, que puede incluir médicos, enfermeros, nutricionistas, entrenadores, sexólogas, y a ser posible deberíamos acudir a un equipo multidisciplinar de profesionales especializados en el área de la fertilidad humana.
Alimentación y fertilidad
Respecto a la alimentación, os remitimos de nuevo al artículo anterior, y recordamos que para mejorar la salud y la fertilidad, deberíamos tener una dieta basada en vegetales, evitando alcohol, alimentos ultraprocesados, bollería, grasas animales, y carnes rojas, carnes procesadas o embutidos.
A conclusiones similares llegan Klaudia Lakoma y compañeras, en una reciente revisión publicada en Nutrients este mismo año 2023.
Actividad física y fertilidad
El ejercicio físico es un conocido protector de la fertilidad masculina. Se ha revelado que el ejercicio puede mejorar el estado de fertilidad masculina en condiciones de infertilidad inducidas por el estilo de vida, como puede ser en casos como la obesidad y la diabetes.
Aram Minas y colaboradores (2022) encontraron que el estado de salud del individuo, así como el volumen, la intensidad y la duración del ejercicio, son factores eficaces que influyen en el efecto beneficioso del ejercicio sobre la fertilidad masculina.
Según los estudios existentes, el sedentarismo contribuye claramente a la infertilidad masculina. La revisión de la literatura capitaneada por Federico Belladelli examinó la relación entre la actividad física y la infertilidad masculina, las características del semen y las tasas de embarazo. Y encontraron que algunas formas de actividad física mostraron una mejora en las tasas de embarazo, mientras que otras no mejoraron consistentemente la calidad del semen. Apuntan que deberíamos continuar con esta línea de investigación para conocer mejor el tipo de relación existente entre ambas variables.
Tabaquismo y fertilidad
Sabemos que los niveles de nicotina, cotinina e hidroxicotinina (que son tres sustancias procedentes del tacaco) en el plasma seminal son comparables a los niveles del suero de los fumadores. Tres sustancias que tienen una asociación negativa significativa con la motilidad de los espermatozoides, y afectan reduciendo por lo tanto la fertilidad. Tras leer la revisión sistemática llevada a cabo por Alghobary, M. y Mostafa, T. sabemos que fumar se considera la fuente más común de exposición al plomo y al cadmio. Algunos micronutrientes metálicos implicados en la patogénesis del estrés oxidativo y la infertilidad masculina, incluido el arsénico y el cadmio y el plomo antes mencionados, se inhalan habitualmente durante la combustión del tabaco o del papel de cigarrillo. Esta revisión sistemática es muy interesante, porque estudia también el efecto entre otras drogas frecuentemente consumidas y su papel en la fertilidad humana, por lo que os la recomendamos si os interesa conocer las últimas evidencias sobre este tema. A modo de conclusión y cierre, nos gustaría resaltar que hay otros muchos factores que influyen en la pérdida de fertilidad masculina. El envejecimiento, el estrés psicológico, (además de la dieta y el ejercicio físico, que ya los hemos comentado) el café, el agua caliente, el escroto caliente y el uso del teléfono móvil son algunas de estas variables modificables del estilo de vida que influyen en el desarrollo de la infertilidad, tal y como apuntan Kumar et al. (2022) en su artículo científico titulado efectos del estrés y la cafeína en la infertilidad masculina.
Otros investigadores también han propuesto estudiar el papel y los efectos de los contaminantes y la polución en la fertilidad. Pues muchos nuevos contaminantes son capaces de influir en la espermatogénesis, y por lo tanto, repercutir negativamente en la fertilidad.
Bibliografía
Alghobary M, Mostafa T. Addiction and human male fertility: A systematic review and a critical appraisal. Andrology. 2022
Belladelli F, Basran S, Eisenberg ML. Male Fertility and Physical Exercise. World J Mens Health. 2023 Jul;41(3):482-488.
Kumar M, Zilate S, Gupta C. Effect of Stress and Caffeine on Male Infertility. Cureus. 2022 Aug 27;14(8):e28487. doi: 10.7759/cureus.28487. PMID: 36176863; PMCID: PMC9513285.
Łakoma K, Kukharuk O, Śliż D. The Influence of Metabolic Factors and Diet on Fertility. Nutrients. 2023 Feb 27;15(5):1180.
Minas A, Fernandes ACC, Maciel Júnior VL, Adami L, Intasqui P, Bertolla RP. Influence of physical activity on male fertility. Andrologia. 2022 Aug;54(7):e14433.