Antes de empezar explicando qué es la asexualidad, es importante tener en cuenta que tanto dentro del colectivo LGTBIQA+, como dentro incluso de la misma comunidad de investigadores de la sexología es un concepto altamente invisibilizado por unos y patologizado por otros.
El reconocimiento de una realidad importa y mucho. Sobre todo, cuando estamos hablando de algo tan inherente a la persona como es su sexualidad y su orientación. Por lo que me parece un imperativo poder, o al menos intentar, hablar de ello.
Las personas asexuales son aquellas que no experimentan atracción sexual hacia otras personas. Y sí, es considerada una orientación.
– «Pero a ver, Laura, si nos dices que no experimentan atracción sexual, ¿cómo puede ser una orientación?»
Pues bien, si nos remitimos a la definición oficial de orientación según la APA (asociación americana de psicología) ésta «es una atracción afectiva, romántica, sexual o emocional permanente hacia otros» compuesta, como vemos, de diversas esferas. Por lo que las personas asexuales, sienten atracción hacia los otros en todas las áreas de la orientación menos en la sexual. Pueden sentir atracción afectiva, romántica y emocional, todas o alguna de ellas.
Por otro lado, cuando hablamos de asexualidad, hablamos en realidad de asexualidades, en plural, pues hay distintas formas de vivirse y expresarse, de la misma forma que la heterosexualidad, la homosexualidad y la bisexualidad tienen distintas y variopintas expresiones. Los asexuales pueden tener relaciones monógamas, poliamorosas, fantasías, intereses en el BDSM y por supuesto pueden tener relaciones sexuales solos o con otros, aunque su motivación NO responde ante la atracción sexual.
Como en casi todos los aspectos, la sexualidad humana se desarrolla sobre un continuo. En un extremo tendríamos a las personas puramente asexuales, en el otro las personas que sí sienten atracción sexual hacia otras personas (heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad, etc.). Entre un extremo y otro encontramos los grises sexuales haciendo referencia a una amplia gama de matices entre no sentir atracción y sentir atracción totalmente. Son personas que raramente sienten esa atracción, es muy baja o solo sienten atracción sexual en ciertos contextos o situaciones, incluso con ciertas personas.
Si nos fijamos en su bandera vemos reflejados estos conceptos como:
- Negro: asexualidad
- Gris: grisexualidad
- Blanco: alosexualidad
- Y por último el violeta que hace referencia a la comunidad.
Otro término importante a mencionar dentro del concepto paraguas de asexualidad, es la demisexualidad. El término demi en latín significa mitad, es decir a medio camino. El individuo experimenta atracción sólo si previamente establece algún tipo de vínculo (emocional, afectivo, romántico, intelectual…). Por ejemplo, imagina que vas por la calle y ves a una persona que te gusta. En jerga coloquial podríamos decir que nos «pone», nos excita, nos encandila… y, a partir de este hecho, podemos sentir la curiosidad de conocerla más. En ese sentido las personas demisexuales, necesitan establecer primero un vínculo para generar esa excitación sexual.
Como hemos ido viendo, la asexualidad es una orientación compleja de entender por varios motivos. En primer lugar, porque no es una orientación, como bien he dicho antes, que se hable mucho de ella (pese que es un tema muy actual), y en segundo lugar porque en una sociedad hipersexualizada pensar en alguien que no pueda sentir atracción sexual hacia los otros, nos resulta extraño incluso difícil de entender.
Quizá sea también porque el término sexualidad con todos sus matices y acepciones tampoco se ha comprendido con toda su extensión y complejidad. Pues no sólo es un acto aislado que puede darse en la intimidad de un dormitorio, sino que es un conjunto de vivencias, expresiones, identidades y orientaciones que definen quiénes somos y cómo nos expresamos.
Abrirnos a la comprensión de otras realidades también nos hace darnos cuenta de quiénes somos; y sobre todo porque es alentador poder encontrar respuestas a lo que sentimos y con lo que nos identificamos.
5 comments
Curioso. Sabía lo que significaba el término, pero ya con tu artículo queda todo muy claro. Ah, y los colores, eso si que no tenia ni idea!
Fantástico post!
Feliz semana!!
Hola Laura! Bienvenida a Más Allá del Placer. Y gracias por compartir tus conocimientos y experiencia con todes nosotres.
Como bien menciona Carla, es una excelente publicación. Me encanta saber el significado de los colores y tú penúltimo párrafo es clave en nuestras vidas. Yo por muchos años pensaba y sentía frustración porque la sexualidad era eso el acto de tener relaciones íntimas.
Leía en Twitter que eres especialista en temas LGTB y sexualidad japonesa. Tengo la duda y me gustaría saber más sobre el tema ya que el concepto sexualidad japonesa no lo había escuchado antes.
Estaré atenta a tus siguientes publicaciones. Y sé que me aportarán mucho a mi vida. Bienvenida!
Muchísimas gracias Carla.
El tema del símbolismo de las banderas es muy interesante. Me alegro mucho de que haya quedado claro. Lo cierto es que son conceptos complejos no solo porque esten invisiblizados, si no porque ponen en duda una sexualidad normativa. Es interesante también incluso para las personas que no tienen esas vivencias porque nos plantean dudas; y al hacernos preguntas entendemos mejor el mundo que nos rodea y por supesto a nostras mismas.
Hola Mónica, gracias por tu comentario y espero que me puedas leer más de ahora en adelante. Es un reto para mi porque tengo muchas cosas en mi cabecita pero me alegro poder compartirlas.
Lo de la bandera si ha gustado me lo apunto para próximas publicaciones.
Y sí tienes razón. Creo que las vivencias de la sexualidad son algo muy personal y que se hable de ello ayuda a generar dialogo. Tener referencias ayuda y mucho. Porque no todos encajamos en ciertos modelos y no por ello debemos renunciar a tener una sexualidad sana.
Mi especialidad de sexualidad japonesa viene de mis estudios sobre la comprensión de la sexualidad desde diferentes puntos de vista, en este caso desde la cultura japonesa. He iniciado esa línea de investigación y planeo seguirla desde Japón aportando y compartiendo información de primera mano.
Muchas gracias 🙂
Hola Laura!
Gracias por tu respuesta me encanta la idea de que nos compartas todo lo que Japón y e descubra y estoy segura que todo lo que hay en tu cabeza nos ayudará y aportará mucho. Así que ya estoy esperando tus siguientes publicaciones. Sobre encajar, es muy cierto! Yo vivía pensando y sintiendo eso, será aquí? Encajaré allá? Qué etiquetas me tocan? Y me frustraba. Afortunadamente personas maravillosas me han mostrado lo equivocada que estaba.